Difusión

Un vaso de agua caliente. Y una bolsita de té. Fíjate lo que va a pasar ahora. El agua caliente extrae los sabores y otras moléculas de las hojas de té y salen flotando al agua, oscureciéndola. Si esperamos un poco más, todo el vaso se llenará por igual con el té fuerte.

Pero, ¿por qué se extiende el té de forma tan homogénea dentro del agua sin siquiera removerlo? Bueno, es como si el agua estuviera moviéndose todo el rato. Esto es la difusión. La difusión ocurre porque las moléculas del agua se están moviendo continuamente, en direcciones aleatorias. Y cuando las moléculas del agua chocan contra el té disuelto, las partículas del té son empujadas de un lado para otro.

De cada vez un poco, partícula a partícula, el agua va removiendo al té. La difusión hace que las partículas se extiendan, desde las zonas donde hay muchas juntas, en concentración más alta, a las zonas donde hay menos, en concentración más baja. La energía con la que el agua empuja, y, por lo tanto, remueve, es el calor. Como el calor no son más que diminutos movimientos a nivel partícula, en direcciones aleatorias, ni siquiera tiene que haber demasiado calor para que tenga lugar la difusión. Espera hasta que se haya enfriado el té, y añade algo más de agua... ...con cuidado de no agitarlo, y ¡fíjate!

Lleva un ratito, pero ¡la difusión también extiende el té en este caso! La difusión no sólo ocurre en los líquidos. También funciona con gases. Imaginemos que estás en el ascensor con tu hermanito, Y resulta que ...bueno, te tiras un pedo. En poco tiempo las moléculas en el aire, que se están moviendo en todas las direcciones, han chocado contra las moléculas del pedo, las veces suficientes como para hacerlas viajar hasta llegar a la nariz de tu hermano.

La difusión resulta útil para un montón de cosas, no sólo para remover el té o tener un ascensor para ti solito. En la naturaleza, todos los seres vivos usan a diario la difusión. Gracias a la ayuda de la difusión, el oxígeno llega desde tus pulmones hasta tu sangre. Y los nutrientes procedentes de la comida que ingieres, son transferidos desde los intestinos a la sangre, con la ayuda de la difusión. El motor que pone en marcha la difusión, es un movimiento diminuto pero rápido a nivel molecular.

Exactamente, el mismo movimiento diminuto que experimentamos a diario como... calor. En los gases la difusión es rápida, porque las moléculas pueden moverse libre y rápidamente. La difusión resulta más lenta en los líquidos ya que las moléculas aquí se mueven de forma más lenta. En los materiales sólidos las moléculas están fijas, y vibran sólo desde donde están, de modo que en este caso no existe difusión.

Difusión. Son partículas... ...que se extienden desde un lugar de alta concentración a lugares con concentración más baja, chocando unas contra otras.