El agua en el cuerpo humano

Kim y Philip se han quedado atrapados en una isla desierta. Venga, Philip, tenemos que encontrar agua. Pero, ¡si me estoy muriendo de hambre! No tengo energía para ir a buscar agua. ¡Primero tengo que comer algo! Philip, una persona puede sobrevivir sin comida durante tres semanas, pero solo un par de días sin agua. ¡Ante todo hay que encontrar agua!

Kim tiene razón. Aunque necesitemos comida y agua, el agua es mucho más importante que la comida para sobrevivir. Pero, ¿por qué es tan importante el agua? El agua nos mantiene vivos y le ayuda al cuerpo a funcionar con normalidad. Nuestro cuerpo está compuesto por células, y el agua es su componente básico.

Unos dos tercios del agua que tenemos en el cuerpo se encuentra en el líquido en el interior de las células, mientras que el resto se encuentra en el líquido que hay entre ellas. El agua disuelve muy bien las demás sustancias, es un gran disolvente. Las sustancias que nuestro cuerpo necesita para funcionar, tales como, vitaminas, minerales, proteínas y carbohidratos se disuelven fácilmente en el agua, lo que hace que dichas sustancias sean fáciles de usar en los distintos procesos, como por ejemplo, la reparación y la división celular. El agua también es un componente importante de la sangre. De modo que el agua no sólo disuelve estas sustancias tan valiosas, sino que también, junto con el oxígeno, las reparte por todo el cuerpo.

Pero el agua también disuelve las sustancias dañinas o aquellas que el cuerpo ya no necesita: las toxinas y los desechos. Las toxinas y los desechos salen del cuerpo, junto con el agua, en forma de orina. Otra función que desempeña el agua dentro de nuestro cuerpo es la de ayudar a mantener estable la temperatura corporal. El agua puede absorber y almacenar muy bien el calor, pero también puede soltar calor corporal si es necesario, por ejemplo, sudando. Cuando el cuerpo no tiene suficiente agua, el calor nos afecta mucho más: puede, por ejemplo, causar calambres musculares.

El agua no sólo impide los calambres musculares, sino que también reduce la fricción en las articulaciones. Resumiendo, el agua es de extrema importancia para el funcionamiento correcto de nuestro cuerpo. Pero, ¿qué cantidad de nuestro cuerpo es realmente agua? Eso depende de la edad, el sexo y el estado físico de las personas. Los niños tienen mucha más cantidad de agua en el cuerpo que los adultos: normalmente entre el 75 y el 78%.

En los adultos la cantidad es más baja: una media de entre el 57 y el 60%. Por norma, los hombres tienen más cantidad de agua que las mujeres porque las mujeres, por naturaleza, tienen más tejido adiposo, que contiene menos agua. Para que nuestro cuerpo funcione con normalidad, esta cantidad de agua tiene que permanecer constante. Perdemos entre 2 y 3 litros de agua al día, principalmente, a través de la orina y el sudor. Por eso es tan importante que cuando perdamos agua, la recuperemos comiendo y bebiendo agua.

Pero si hace mucho calor o hacemos ejercicio, tenemos que beber más de lo normal, porque sudamos más. Kim y Philip ahora tienen sed, lo que significa que ya han perdido del 2 al 3% de su agua corporal. Con que pierdan sólo un poquito más de agua, su coordinación física empeorará, y les costará pensar con claridad. ¿Me lo estoy imaginando o ahí delante hay un riachuelo? ¡Estamos salvados!