El reflejo cóncavo y el convexo

¿Qué estás haciendo? Mira esto. Muy maduro. Si le das la vuelta, la imagen se pone al revés. Déjame ver. ¿Por qué?

Una cuchara brillante es como un espejo -solo que curvada. Debido a que la superficie es completamente lisa, proporciona una imagen en espejo -un reflejo especular. Pero al ser curvada, los rayos de luz se reflejan en diferentes direcciones, según en qué lugar de la cuchara impactan. Este lado que sobresale se denomina el lado convexo. Los rayos de luz rebotan en la cuchara, y en el punto exacto en el que un rayo impacta en la superficie, su ángulo de incidencia es el mismo que el ángulo de reflexión.

Pero, como la cuchara es curvada, lo normal es diferente en distintos puntos. Un espejo convexo reúne los rayos de luz de un área más grande que un espejo plano común. Mira los ángulos de reflexión que están cerca de los bordes. Son más grandes que los de un espejo plano. Philip ve una imagen de gran ángulo.

Un espejo convexo hace que lo que ves sea más pequeño, y más aún cuando miras cerca de los bordes. Los espejos convexos a veces se usan para ver las esquinas en el tráfico o en las tiendas para detectar ladrones. Dale la vuelta a la cuchara. Este lado que se curva hacia dentro se llama cóncavo. Es hueco como una cueva.

Un espejo cóncavo reúne los rayos de luz que impactan en él. Por eso si estás cerca de un espejo cóncavo, verás un aumento. Un espejo cóncavo puede ser útil en el baño cuando te estás maquillando o afeitando. Si te alejas de un espejo cóncavo, alcanzas el punto focal. En este punto, la imagen se vuelve borrosa.

Todos los rayos paralelos incidentes de luz son recogidos en el punto focal. Si sigues alejándote, la imagen en un espejo cóncavo se invierte. Los rayos de luz se cruzan en el punto focal y salen por el lado opuesto. Al revés. Al derecho.

Al revés. Al derecho.