Las bases

Ah, ahora que he puesto un poco de azúcar en el zumo de limón, no está tan ácido. ¡Holaaa! ¿No has estado escuchando? No es el sabor lo que indica la acidez. Vamos a repasarlo una vez más. Que el zumo de limón sea ácido significa que contiene muchos iones de hidrógeno, en comparación con el agua pura. Añadir azúcar no cambia eso, sino que solo oculta el sabor ácido. ¡Vale, vale, entendido!

El azúcar no cambia la cantidad de iones de hidrógeno en la limonada. Si quiero eliminar la acidez, ¿qué debo añadir entonces… para quitar los iones de hidrógeno? Tendrás que añadir algo que sea opuesto a un ácido; tienes que incorporar una base. Jenny tiene razón. Una base es lo opuesto a un ácido.

Los ácidos son sustancias que liberan iones de hidrógeno. Las bases pueden reaccionar con iones de hidrógeno uniéndose a ellos. Echa un vistazo a esto: un átomo de hidrógeno y uno de oxígeno unidos entre sí; es decir, un ion de hidróxido. Al añadir iones de hidróxido a un ácido… los iones de hidróxido cogerán los libres de hidrógeno, formando agua. Los iones de hidrógeno no están libres en la solución; la solución no es tan ácida como antes.

Todas las sustancias que contienen iones de hidróxido son bases. Un ejemplo es el hidróxido de sodio, que se usa como limpiador de desagües. Si embargo, una sustancia no tiene que contener iones de hidróxido para ser una base. El factor importante es la capacidad de capturar iones de hidrógeno. Como este gas: el amoniaco.

Tiene un átomo de nitrógeno y tres átomos de hidrógeno. Al igual que el ion de hidróxido, la molécula de amoniaco puede incorporar un hidrógeno más. Esto significa que si se añade amoniaco a un ácido, disminuye la cantidad de iones libres de hidrógeno; el amoniaco es una base. ¡Vale, entonces usaré un poco de limpiador de desagües en la limonada para hacerla menos ácida! ¡No, Michael, para! Eso es demasiado fuerte para utilizarlo en la cocina. Podrías dañarte tu boca. ¿Tal vez tienes un poco de bicarbonato?

Se utiliza en la respostería como levadura. No es tan fuerte como el amoniaco o el hidróxido de sodio, pero tiene el mismo efecto: los iones de hidrógeno del ácido son recogidos por el bicarbonato… ¡Felicidades, ahora el zumo de limón no está tan ácido! ¡No, pero ahora sabe horrible!